martes, 13 de diciembre de 2011

Urdangarín (Soneto 602)


Guapo, joven, prolífico consorte,
semental por bragueta consumado,
por medrar con tu espléndido ducado 
hoy te ves desterrado de la Corte.

Perdida la prestancia de tu porte,
deambulas cabizbajo y ofuscado,
pesaroso, perdido y derrotado,
después de confundir el sur y el norte.

¿Qué te faltaba,  ruin Urdangarín,
para haberte metido en este embrollo,
del que puedes gozar un buen botín,

pero a cambio de haber perdido el chollo,
de pasar por osado malandrín
y de verte plantado en el arroyo?



1 comentario:

  1. Quiso hacerse rico muy rápido, no ha tenido la paciencia de irse haciendo rico poco a poco, sin hacer ruido, sin que la opinión publica de enterase, no se fijo en los que tiene al lado y así le ha ido.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar