lunes, 29 de abril de 2013

Resacas (soneto madre)

 
 Me emborraché de culpas y plegarias
en el oscuro duelo del sesenta,
anotando borrones en la cuenta
de las nefandas faltas solitarias.
 
Me embriagué con estelas candelarias,
igual que aquellos locos de la absenta
alocaron su atmósfera irredenta
 en parisinas noches tabernarias.

Me aturdieron inciensos cuaresmales:
vapores endulzados, celestiales,
antídoto del tufo sulfuroso.

Así quedé después de aquellos velos:
a la zaga de efímeros consuelos;
de la gran borrachera resacoso.



 


sábado, 27 de abril de 2013

Por soleares

 
 
Hay que ser muy desgraciado
para pasarse la vida
criticando al que está al lado.
 
No me hacen falta doctores,
que yo sé muy bien de dónde
me vienen estos dolores.
 
Me condenaron a muerte
el día que me dijeron
que no volvería a verte.


martes, 23 de abril de 2013

La tinta del calamar

 
Suelta tinta el calamar
cuando se ve acorralado,
por dejar todo enturbiado
y así poder escapar.
 


sábado, 20 de abril de 2013

Pero lo quiero


 
Lugar de cruces, mas no muchas luces,
jaculatorias, lúgubres memorias,
torpes chapuces, rígidas testuces,
vanas victorias, infecundas glorias.
 
Pueblo de honores, marchitadas flores,
castas de artistas, frígidas aristas,
falsos señores, básicos amores,
tres populistas, miles de ombliguistas.
 
Oscuro y claro, ni razón ni amparo;
las procesiones, rezos y pregones;
los bichos raros, los carnés del paro;
magnos barones, los Albarizones.
 
Pero lo quiero, claro que lo quiero,
quiero a mi pueblo cándido y frontero.
 
 


jueves, 18 de abril de 2013

Un poco sobre la Justicia



 
 
Transitan por los estrados
de los severos juzgados
muchedumbres de testigos
que rechazan ser amigos
del palpable criminal
y que declaran, perjuros,
que el acusado era puro,
cuando era en verdad culpable
de un crimen abominable
que ocasionó mucho mal.
Así libra el delincuente
de la pena pertinente,
prevista y bien definida
por hallarse comprendida
en el Código Penal.
Porque el Juez se ve impedido
de penar a aquel torcido,
al aplicar, con conciencia,
la presunción de inocencia,
que es principio elemental.
Esto ocurre muchas veces,
y provoca horror con creces
en el paisano de a pie,
que al vil delincuente ve
por la calle tan normal;
e infiere, con pesadumbre,
que es mucha la podredumbre
que perturba a la Justicia,
lo que no siempre propicia
la fortuna judicial.

viernes, 12 de abril de 2013

A Antonio Gallardo. In memoriam

 
Gallardo por excelso y por galano,
también por patronímico Gallardo,
ha muerto el inspirado y hondo bardo,
el cantor de lo jondo jerezano.
 
Tan recto y bondadoso ser humano
se lleva al Cielo un imponente fardo
de coplas con color y olor a nardo
que trasminan el ser y el son gitano.
 
Se va cuando estalló la primavera
en orgía de tersos azahares
en su tierra sufrida y pinturera.
 
Adiós, Antonio: tañen por soleares
las sonantas gitanas por la vera
de una muralla llena de pesares.
 
 


domingo, 7 de abril de 2013

A walking dead

 
Camina el muerto viviente,
cambembo y desmadejado,
por un camino empedrado,
escupiéndole a la gente
que no sigue su corriente.
Olvidó sus fechorías,
y ahora reza avemarías
como si fuera muy santo,
él, que pecó tanto y tanto
durante todos sus días.
 
 

sábado, 6 de abril de 2013

De dardos y ladridos

 
 
No me afecta que el viejo dictador,
al modo de los gánsteres mafiosos,
me acometa con dardos venenosos
creyendo que me infunde algún temor.
 
Por contra, sentiría gran horror
si este tipo, de pasos sospechosos,
me propinara halagos generosos:
eso sí que sería un deshonor.
 
Ladran los perros: cabalgamos pues,
suele decirse en caso semejante;
y qué verdad este proverbio es.
 
Ladre, entonces, el más grande tunante;
que ladre y ladre igual que un gran danés:
señal de que camino hacia adelante.


jueves, 4 de abril de 2013

De facturas y cabestros

 
 
 
Qué bien quedaba con dinero ajeno
este rudo aspirante a señorito,
cacique, megalómano y maldito,
dictador sin escrúpulo y sin freno.
 
Qué fácil es así pasar por bueno,
por bienhechor atento y exquisito,
saliéndole su aporte gratüito
por ser resulta de un sistema obsceno.
 
Vuelan facturas por el turbio cielo
del vasto alfoz del pobre municipio
que vio pasar sus glorias sin consuelo.
 
Y aquí quedó mi pretencioso ripio,
que sólo quiere levantar el velo
de un cabestro caduco y sin principio.