lunes, 31 de mayo de 2010

Cayetana de Alba (Soneto 40)


Hoy te he visto sentada muy moderna,
con chupa en que relucen lentejuelas,
con joyas que parecen bagatelas
y media de rejilla en cada pierna.

Luces tu primavera sempiterna,
prescindes de patrón y parentelas,
muestras que todo va miel sobre hojuelas,
que nadie a tu persona la gobierna.

Tu foto en la revista, Cayetana,
dice que eres mujer que va sin rienda,
que tienes una mente muy lozana,

que vistes con gracejo cualquier prenda,
que haces lo que a ti te viene en gana,
sin temor a que nadie se te ofenda.

Y que nadie pretenda
que dejes de tratar al funcionario
cuando van a mermarle su salario.


sábado, 29 de mayo de 2010

Manual del concejal (Soneto 39)


Salir en los papeles cada día,
aunque sea por la cosa más banal;
mostrar a los demás gran simpatía,
aunque clave por bajo su puñal;

bailar swing, rock and roll o bulería,
aunque lo haga patentemente mal;
procesionar con actitud muy pía,
aunque tenga por alma un albañal;

circular con chofér o choferesa,
aunque sea a la vuelta de la esquina;
cortejar al marqués y a la marquesa,

aunque al noble le tenga mucha inquina;
maldecir del alcalde o alcaldesa,
aunque luego les haga de menina.

Son una cosa fina:
pandilla de ignorantes persuasorios
que se van a cargar los consistorios.



Van Gogh (Soneto 38)


Un sol de fuego y cadmio que ilumina
las ramas de cipreses ondulantes
derrama pinceladas enervantes
sobre un campo que forma la retina.

El aire se revuelve en la colina
movido por pinceles trepidantes
que una mano de nervios lacerantes
empasta con rabiosa disciplina.

Los cipreses apuntan a ese cielo
que negó la salud al trastornado
en cuya vida no paró el consuelo.

El sol irradia luz, calor y enfado,
lacera el corazón como un flagelo
y baña con ardor montaña y prado.

Pobre ser desquiciado.
Profetizó el arte venidero
a costa de pasión y desafuero.

(Ver soneto 37)



viernes, 28 de mayo de 2010

Sorolla (Soneto 37)


 La luz inabarcable de tu suelo,
de tu tierra, tu mar y tu celaje,
abarcaste con próvido lenguaje
nacido de tu ingenio y de tu anhelo.

Pintado tu país con noble celo,
el retrato de todo su pelaje
es imagen, reseña y homenaje,
tratado, disección, festejo y duelo.

Tus blancos ataviaron damiselas,
encresparon azules rompeolas,
matizaron desnudos femeninos,

enhebraron las tramas de las velas,
bañaron de las flores las corolas,
y empastaron adornos campesinos.

¿Y esos tonos marinos?
Brotaron de paleta generosa,
de ojo fiel y de mano primorosa.

(Ver soneto 332)


jueves, 27 de mayo de 2010

Miguel Delibes (Soneto 36)



La guerra del abuelo referida,
la escopeta guardada en el armario,
el hambriento emigrante sin su diario,
la pluma en una urna guarnecida,

la viuda solitaria redimida,
el campo de Castilla y su ideario,
el mundo que agoniza y su calvario,
la señora de rojo tan sentida,

los inocentes santos en su tierra,
el hereje buscando salvación,
la hoja roja del libro de fumar,

las perdices, las tórtolas, la perra,
la vida sin ninguna abjuración,
la muerte que no dudaste en llamar.

Es fácil olvidar.
Que no sirva tu muerte presentida
Para ver tu grandeza desmentida.


miércoles, 26 de mayo de 2010

Paris - Roland Garros (Soneto 35)


Tres dïas pasé en París el de la France,
y ahora que Vueling me retorna a casa,
por ver si así mi gran congoja pasa,
de lo vivido les daré un avance:

Como el calor nos puso en cierto trance,
he comprobado que el sudor traspasa
lo mismo al de París que al de Tarrasa,
al de Verona o al de Bujalance.

En el tenis estuve una jornada
que por ser demasiado calurosa
produjo una secuela no buscada:

y es que la gente, tan maravillosa,
de su desodorante abandonada,
transmuta de adorable en apestosa.

Pedro Pacheco (Soneto 34)


Érase un hombre a su poder pegado,
érase un personaje impetuoso,
érase un ejemplar muy ambicioso,
érase un mocetón muy trabajado.

Érase un petimetre mal hablado,
érase un regidor muy pretencioso,
érase un elemento mentiroso,
érase un transgresor no empapelado.

Érase una gran testa, gigantesca,
érase un corredor perseverante,
érase un animal siempre a la gresca.

Érase un dirigente ceceante,
érase una persona más bien fresca,
érase, por demás, un gran farsante.

domingo, 23 de mayo de 2010

Depresión primaveral (Soneto 33)


No sé qué pasa cada primavera,
que después de un invierno sosegado,
empiezo a caminar descaminado
por una descarnada carretera.

Mi alma sin yo quererlo se me altera;
mi cuerpo está lo mismo derrengado,
que corre cual caballo desbocado,
en una absurda y demencial carrera.

Tristeza, postración, abatimiento,
me acompañan por esa senda amarga,
clavándome un arpón al sentimiento.

¡No quiero que esta pena sea muy larga!
Pondré dura barrera al desaliento
para poder volar sin esa carga.
                                                          25 de marzo de 2010


sábado, 22 de mayo de 2010

Funcionarios (Soneto 32)


Yo sé bien que trabaja el funcionario
con paga cada mes asegurada
y plaza de por vida reservada,
pero cobrando sólo su salario.

Al banquero le ocurre lo contrario:
puede ver su poltrona retirada,
pero si es una época dorada
en poco se hace multimillonario.

¿Y por qué si los bancos son culpables
de la crisis que asola al mundo entero
por sus prácticas no recomendables

el gobierno dispara tan certero,
cual si fueran los máximos culpables,
a los que ganan siempre igual dinero?

Serrat, Machado y Miguel Hernández (Soneto 31)


Fuiste a beber en dos poetas muertos,
condenados por mor de esas Españas
que lanzas arrojaban, y no cañas,
sobre sus hijos en los prados yertos.

Tu guitarra voló sobre los huertos
que acumulaban sangre en sus entrañas
por muerdos de las bestias y alimañas
que dejaron los tiempos descompuestos.

Se hace al andar camino, dice el verso
que te dejó en herencia el poeta digno,
el que murió de pena en tierra gala.

El otro te legó en lenguaje terso
poemas de hambre y sombra, como signo
del sufrir con la muerte en la antesala.

¿Cuál es la España mala?
Yo no quiero ninguna que en su tierra
esparza las semillas de la guerra.

viernes, 21 de mayo de 2010

Treinta sonetos (Soneto 30)


Llevo treinta sonetos publicados
y no se han apuntado seguidores;
seguro que será por mis pecados,
y no por desazón de los lectores.

Comprendo que en la red están montados
millones de selectos blogueadores,
que son por todo el mundo visitados
y que engordan sin fin sus marcadores.

No sabe usted lo que me cuesta esto
de escribir cada vez catorce versos
endecasílabos y bien de rima.

Tal menester merece un claro gesto:
que los lectores no me sean adversos,
que me sigan y suban mi autoestima.

(Ver soneto 1)

jueves, 20 de mayo de 2010

Pastillas (Soneto 29)


Seis pastillas ingiero cada día,
todas ellas prescritas cabalmente,
para cuidar así mi cuerpo y mente,
por ínclitos doctores de valía.

Como debo evitar cardiopatía,
y alguno que otro mal conjuntamente,
llevo a cabo una dieta conveniente:
poca carne y bastante alboronía.

En dos meses tres kilos he perdido,
ya me puedo abrochar los pantalones,
la tensión arterial he rebajado,

mi mujer sufre menos mi ronquido,
más ágil ejecuto mis acciones
y digiero mejor lo manducado.

Mas no me han recetado
tratamiento, remedio ni terapia
para dejar de oír como una tapia.


miércoles, 19 de mayo de 2010

La rosa (Soneto 28)


Todo está dicho ya sobre la rosa,
la flor desde lo antiguo venerada,
de los jardines reina proclamada,
entre todas la más linda y donosa.

No cabe recitar con voz calmosa
ningún romance, trovo ni alborada
que no haya sido ya cosa cantada
en una rima limpia y cadenciosa.

Por eso yo le tomo de prestado
a Juan Ramón Jiménez sólo un verso
para gloria de flor tan portentosa.

Con él aquí proclamo, embelesado,
en la grandeza de esta planta inmerso:
¡No le toques ya más, que así es la rosa!

martes, 18 de mayo de 2010

Mi peluquero (Soneto 27)


Cuatro lustros me lleva ya pelando
el bueno de Joaquín el peluquero;
no me poda en la forma que yo quiero,
pero dejo que goce recortando.

Cierto que mal peinado siempre ando,
no por culpa del fígaro motero,
sino de mi pelamen pendenciero
que nunca se somete a ningún mando.

¿Qué verá este barbero competente
a través de mi cuero cabelludo
cuando blande en el aire su tijera?

¿Puede ser que conozca bien mi mente,
y que sepa que soy un ser tozudo,
porque alcance a leer en mi mollera?

lunes, 17 de mayo de 2010

La inspiración (Soneto 26)


Esta tarde la llevo un poco floja:
voy volando, como una mariposa,
revoloteando de una a otra cosa
a ver en dónde poso mi congoja.

He cogido una pluma y una hoja
para espantar esta actitud premiosa,
y así buscar esa oración preciosa
que engarzada en mi blog luego se aloja.

Mas hoy la inspiración no se aparece,
aunque el diario soneto voy logrando,
lo cual un pensamiento se merece:

y es que más que pasarse el día pensando,
cualquier obra comienza, anda y crece
si nos sorprende el duende trabajando.




domingo, 16 de mayo de 2010

Latín macarrónico (Soneto 25)


Yo parto del latín ora et labora
para hacer ab initio este soneto.
A dura lex sed lex hoy me someto
y a divide et impera desde ahora.

Beatus ille que el verso no desdora;
ecce homo que no es analfabeto,
rara avis, ad hoc y bien discreto:
obiter dicta quede por ahora.

Pater familias yo, es mi alter ego
quien de facto intra muros lo compone
sometido ex professo a este test.

Quo vadis?, me dirán por este apego,
y yo sigo erga omnes que se opone;
puedo decir que consumatum est.

sábado, 15 de mayo de 2010

Baltasar Garzón (Soneto 24)


Criminales de guerra, genocidas,
traficantes de droga, terroristas,
políticos corruptos, camorristas,
ultras de condición, liberticidas,

fortunas por la muerte conseguidas,
mercenarios del GAL, contrabandistas,
prestos a torturar, tardofranquistas,
personas a la mafia agradecidas,

todos hoy se alborozan complacidos,
celebran con champán la gran noticia,
se sienten algo menos perseguidos,

sonríen con inquina y con malicia,
al ver que ganarán los corrompidos,
botando al que buscaba la justicia.


viernes, 14 de mayo de 2010

Tecnología (Soneto 23)


En el curso presente de la ESO
me ha tocado estudiar Tecnología;
como al niño no le entra la teoría,
yo le intento aliviar un poco el peso.

Al andar en el tema un tanto tieso
- pues lo mío es más bien la abogacía -,
heme aquí consultando todo el día
para no resultar un padre espeso.

Mecanismos, circuitos, resistencias,
palancas, electrones, estructuras,
demuestran mis estólidas carencias.

Esquemas, armazones, composturas,
imanes, protección, incandescencias,
me ponen en continuas apreturas.

En estas coyunturas,
noto con desazón cuánta ignorancia
sobrellevo feliz desde la infancia.

(Ver soneto 280)



jueves, 13 de mayo de 2010

Recuerdos de la infancia; ensoñación (Soneto 22)


Rebozado con blanca arena fina,
en una playa próvida de vistas,
con cangrejos que hacían de coristas
a una reina vestida de coquina.

El vapor me asustó con su bocina,
la medusa se fue con los turistas,
y un inglés que traía tomavistas
se zampó un gran melón y una sardina.

Una ola más enorme que un gigante
quiso ser la madrina de los pinos
y con algas se fabricó un turbante.

Por la tarde llegaron otorrinos;
a los niños nos dieron un purgante
y se hundieron cuarenta submarinos.

Berrinches repentinos:
quise yo recortar el horizonte
y mi primo pescó un rinoceronte.


miércoles, 12 de mayo de 2010

El Rey y la sanidad pública (Soneto 21)


Ya sale nuestro Rey muy mejorado,
y dice con total tranquilidad
que tenemos muy buena sanidad,
y agradece lo bien que lo han dejado.

¿Cuánto tiempo de espera ha soportado?
¿En la cama ha tenido vecindad?
¿Lo han tratado con poca humanidad?
¿En el parking muy caro le han cobrado?

Yo no sé donde pisa esta criatura:
sobre el suelo, igual que los mortales,
o se queda volando por la altura.

Pues si yo necesito curar males,
o tengo que esperar hasta la hartura,
o gastarme en privado mis caudales.

(Ver soneto 262)




martes, 11 de mayo de 2010

Mi humilde jardín (Soneto 20)



Mi jardín es pequeño y recogido,
no luce ni laguna ni sendero;
sólo tiene a lo largo del lindero
un arriate por piedras protegido.

Con traza de vivir muy afligido,
sin copa que lo tilde de altanero,
intenta florecer un limonero
tan joven que su fruto no ha nacido.

Blancas calas, anémonas, rosales,
han sido los primeros en dar flores
tan pronto se anunció la primavera.

Ipomeas, geranios a raudales,
han seguido llenando de colores,
el aire de mi casa pinturera.

¡Qué buena jardinera,
la que poda, recoge, riega y planta:
la que es de mi jardín la gobernanta!




lunes, 10 de mayo de 2010

El gazpacho (Soneto 19)



Si quiero preparar un buen gazpacho
no hace falta tener mucho talento.
Solo hay que tener ajo, más pimiento,
y pan no poner mucho, sólo un cacho.

Mandar cortar pepino sin empacho,
al vinagre y aceite estar atento,
tomate, algo de pan, con fundamento,
cebolla, sal y agua: ya remacho.

Después dependerá de cada caso
que se eche más vinagre o más pepino,
menos pan, menos ajo o menos hielo.

En un bol, en un plato o en un vaso,
beber un preparado tan divino
es placer que te eleva al quinto cielo.


domingo, 9 de mayo de 2010

La gente que te lo cuenta todo (Soneto 18)


No soporto a la gente que me cuenta
hasta el último dato de su vida,
y aunque nota mi cara adormecida,
persiste en su monserga tan contenta.

Yo presumo de ser de pasta atenta,
pero si la historieta es desmedida
mi mente se convierte en distraída
aunque la situación quede violenta.

Otras veces asiento afectuoso,
con tal derroche de veracidad
que a nadie le resulta sospechoso,

cuando lo que sucede en realidad
es que anhelo que muera el tipo odioso
o que padezca alguna enfermedad.


viernes, 7 de mayo de 2010

Paco Gandía (Soneto 17)

 

Nunca tuvo jamás Andalucía
quien contase mejor los sucedidos,
como casos verídicos surtidos,
que el afable y jovial Paco Gandía.

Mucho tiempo nos trajo la alegría
con entierros, garbanzos, parecidos,
muchachitos un poco distraídos
y brutísimos mozos de alquería.

Era un hombre cabal, bueno y humano,
capaz de trabajar no por dinero,
sino por dar socorro a un pobre hermano.

Palangana, cofrade, sandunguero,
fue lo más del gracejo sevillano,
una luz en un mundo tan rastrero.

Heroína destruye y mata (Soneto 16)


Hoy te he visto enterrado en tu esqueleto,
penando los estragos que en tu vida
ha dejado el caballo que sin brida
cabalga por tus venas sin secreto.

Hoy he visto tu vida sin objeto,
salvo andar a la búsqueda aturdida
de una lenta y oscura despedida
que tienes asignada por decreto.

Hoy he visto tus ojos sin destino,
tus pómulos azules, descarnados,
tus hombros sin alzar, tu andar cansino.

Hoy he visto tus dientes desastrados,
tu discurso grotesco y anodino,
tus carnes y tus huesos condenados.

Y los tuyos desolados,
por culpa de la plaga depravada
que te lleva a la muerte en cabalgada.


jueves, 6 de mayo de 2010

El Fiscal pide prisión para Isabel Pantoja (Soneto 15)


Ha fijado el Fiscal en su alegato
que las dos compañeras de Julián
sabían sin reparo que su plan
era estar saqueando todo el rato.

En Marbella regía un cacicato
que otorgaba poderes al truhán
para vaciar la hacienda con afán
y llevar una vida de boato.

Pero ahora seguro las dos damas
nos querrán convencer a los paisanos,
a base de falacias y soflamas,

que el dinero que hallaban en sus manos
- que les daba Julián con mil zalamas -
lo ganaron sudando como enanos.


miércoles, 5 de mayo de 2010

En la sala de espera del médico se puede escribir un soneto (Soneto 14)


Hoy me encuentro en la espera del doctor.
Enfrente tengo a tres accidentados,
los tres en las revistas enfrascados
a ver qué dice tal o cuál actor.

Del tiempo quiero ser un buen gestor.
Por eso mis sonetos tengo armados:
veré los dos cuartetos consumados
en cuanto acabe éste: qué primor.

Han entrado ya dos de los pacientes,
por cuya circunstancia me acelero,
pues no quiero dejar versos pendientes.

En la línea presente voy ligero,
no me paro a pensar en los dolientes...
y con esto el soneto ya está entero.

martes, 4 de mayo de 2010

La letra "A" mayúscula (Soneto 13)



Vaya letra preclara esta vocal,
la primera de todo el alfabeto,
con cúspide que quiere ser abeto
y dos patas abiertas en canal.

Para el género es fenomenal,
pues indica que algo muy concreto,
sea nombre, sustantivo o bien sujeto,
es femenino no por un casual.

Me admira su simétrica apariencia,
me aturde su presencia persistente,
me deslumbra su útil evidencia.

La A es una letra consistente,
rezuma como cierta impertinencia,
y está en nuestras vidas diariamente.

lunes, 3 de mayo de 2010

El farero de Chipiona (Soneto 12)


Al farero del faro de Chipiona
le robaron los cacos su bombilla.
El buen hombre le dijo a su chiquilla
que le fuera por una al Mercadona.

Mas la muchacha se hizo remolona
y se fue retozando por la orilla,
se comió un bocadillo de tortilla
y no paró hasta cerca de Estepona.

El farero quedó muy confundido
con la broma tan tonta de Dolores.
Pero él era un hombre precavido,

y por ello evitó males mayores,
colocando en el sitio del casquillo
una ristra de luces de colores.

domingo, 2 de mayo de 2010

Xerez Club Deportivo (Soneto 11)



Un equipo de magno poderío,
que consiguió un ascenso con bravura,
está a punto de ver que su aventura
se liquida en un grave desavío.

Al final ha sacado mucho brío,
cuando queda muy poco de andadura,
y es lo cierto que en esta coyuntura,
aún se atreve a sufrir el desafío.

Ha fichado a un mister muy astuto,
posee jugadores con talento,
y el público le apoya en absoluto.

¡Pues que no ha de llegar el desaliento;
sufrirán hasta el último minuto,
morirán, si es preciso, en el intento!

sábado, 1 de mayo de 2010

Sara Baras (Soneto 10)


Su pícara mirada me fascina,
su cuerpo de vestal me conmociona,
me subyuga su porte de amazona,
que no empece su esencia femenina.

Para mí tiene rango de divina,
es sublime, cabal, bella persona,
tiene casta, al igual que una leona,
y como bailaora es la más fina.

Su talento es etéreo, profundo,
no tiene parecido su hermosura,
que muestra embelesando a todo el mundo.

Me quedo suspendido en su cordura,
Sara Baras, lo digo así, rotundo,
es memorable en toda su estatura.

(Ver soneto 240)