martes, 16 de noviembre de 2010

Las tiendas de los chinos (Soneto 209)


Se vienen a quejar los comerciantes,
aparte de pagar muchos impuestos,
y de los ambulantes con sus puestos,
de un problema que no tenían antes.

Se trata de una clase de inmigrantes
que les son especialmente molestos,
porque venden cualquier clase de tiestos
a precios que resultan aplastantes.

Los chinos - dicen nuestros mercaderes -
no pagan sus impuestos al Estado,
y venden sus paraguas y alfileres

teniendo abierto siempre su tinglado;
y si la muerte ejerce sus poderes,
nadie averigua dónde va el finado.


1 comentario:

  1. Ahh tanto quejarnos y quién no ha ido a comprar a algún chino???

    Saluditos

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